El circo de los PCF

Transporte XXI

Los servicios de inspección en frontera son un esperpento. Es una de las conclusiones que puede extraerse del análisis de la situación de los Puestos de Control Fronterizo (PCF) realizado por la Federación Española de Transitarios, que arroja luz sobre lo que era un secreto a voces.

El diagnóstico es claro: falta de comunicación le la Administraci6n con el sector, diversidad de criterios, de sistemas informáticos y de procedimientos en cada plaza, careciendo de la más mínima uniformidad, junto a la falta de personal, sobre todo de especialistas. Una situación que está provocando desvío de tráficos y lastrando las posibilidades de que España se pueda convertir en hub logístico mundial.

El sector exige rapidez, agilidad y uniformidad le criterios. O lo que es lo mismo, una buena dosis de sentido común. No hace falta inventar la rueda. Algunos países europeos, caso de Países Bajos, tienen una aduana que es una autentica envidia.

El nuevo Gobierno que se forme, si las matemáticas cuadran, sin necesidad de volver a pasar por las urnas, tiene tarea por delante. Y Europa también, porque España no detenta la exclusiva de es­tos males. La ambiciosa propuesta de reforma aduanera lanzada por Bruselas parece ir en la buena direcci6n. El texto recoge la creación de una Autoridad Aduanera de la UE para garantizar, precisamente, unos criterios uniformes. Queda una larga tramitación, nada sencilla, y habrá que esperar a ver la letra pequeña. Sería de desear que se cumplan los objetivos y que no se pueda decir aquello de que Spain is different, porque en transporte y logística no suele ser sinónimo de competitividad.